Dicen que no todos los seres vivos fueron salvados en el arca de Noé. Tres criaturas, temidas incluso por las fuerzas del cielo, quedaron atrás. Mientras las aguas cubrían la tierra, estas bestias desafiaron la voluntad divina, convirtiéndose en leyendas vivientes que aún estremecen a quienes escuchan sus nombres." La primera de estas criaturas era la Quimera, una amalgama de león, cabra y serpiente. Las historias afirman que sus rugidos podían partir montañas y que incluso el océano se agitaba al sentir su presencia. Luego, encontramos al Ahuízotl, un ser acuático de origen mesoamericano, conocido por su aterrador grito que hacía vibrar la tierra misma. Finalmente, el Basilisco, una criatura cuyos ojos podían destruir vidas con solo mirarlos. Sin embargo, estas historias no aparecen en la Biblia. Son relatos nacidos de leyendas humanas que no coinciden con el texto sagrado, donde se preserva la creación tal como Dios la ideó. ¿Son ecos de temores antiguos o algo más? Las respues...

  "La conexión entre Jesús, el pan y el número 490 es absolutamente asombrosa." Jesús dijo: "Yo soy el pan de vida." Pero, ¿dónde nació? En Belén, o Beit Lechem en hebreo, que significa "Casa del Pan." Esto no es solo un detalle curioso; en hebreo, cada letra tiene un valor numérico, y el valor de Beit Lechem es 490. Este número se repite con una precisión que no puede ser casualidad. "Nacimiento" en hebreo también tiene un valor numérico de 490, al igual que la palabra Tamim , que significa "perfecto" o "completo." Jesús, nacido en la Casa del Pan, no fue simplemente un maestro o un líder, sino el sacrificio perfecto que estaba destinado a transformar la humanidad. Cuando Pedro le preguntó cuántas veces debía perdonar, Jesús respondió: "Setenta veces siete." Ese número, 490, no es arbitrario. Representa la perfección en la gracia, la plenitud en el perdón. Jesús no solo habló del perdón, lo vivió como la encarnac...

 ¿Qué significa la inscripción INRI que aparece en la cruz de Jesús? Estas iniciales, provenientes del latín IESUS NAZARENUS REX IUDAEORUM , se traducen como Jesús de Nazaret, Rey de los Judíos . Según el Evangelio de Juan 19:19-22, fue colocada por orden de Poncio Pilato en hebreo, griego y latín, para que todos los presentes pudieran leerla. Aunque Pilato pretendía usar estas palabras como una burla hacia Jesús y sus seguidores, el mensaje cobró un peso inesperado. Los líderes religiosos insistieron en que se corrigiera, argumentando que Jesús solo afirmaba ser rey, pero Pilato respondió con una frase contundente: "Lo que he escrito, he escrito". Aquella inscripción, pensada para ridiculizar, terminó marcando una verdad que iba más allá de la intención original. No describía a un rey político, sino a alguien cuyo reino no tenía fronteras terrenales. INRI sigue desafiando a quienes lo contemplan, dejando abierta la pregunta: ¿qué tipo de rey reconocemos en esta escena?

  El Valle de los Huesos Secos: La Vida Nace en el Silencio de la Muerte En el centro de un valle silencioso, los huesos esparcidos no solo evocan la muerte, sino el olvido más absoluto. Cada fragmento parece un testimonio mudo de lo que alguna vez fue, hasta que una voz rompe el silencio. Dios le ordena a Ezequiel que hable a los huesos, que les profetice vida. En ese instante, lo improbable sucede: los huesos se mueven, se reúnen, y son recubiertos por tendones y carne. Sin embargo, siguen siendo cuerpos vacíos. La visión representa la restauración de un pueblo que había perdido su identidad y propósito. Cada movimiento de los huesos, cada soplo, refleja un mensaje de esperanza para lo que parecía olvidado. Este valle revela una verdad poderosa: incluso lo que está roto puede ser restaurado cuando se conecta con la fuente que da vida.

  Sus ojos ardían como brasas, y su sola presencia era un grito de poder roto. Los Vigilantes, ángeles que alguna vez caminaron entre las alturas, descendieron para cruzar límites prohibidos. Su apariencia desbordaba majestad, pero también revelaba una corrupción innegable. Su piel, pálida y agrietada, brillaba con destellos de fuego interno, como si su esencia se estuviera desmoronando. Las alas, otrora gloriosas, ahora eran sombras deformes, un eco de lo que alguna vez fueron. Los Vigilantes, ángeles caídos descritos en el antiguo Libro apócrifo de Enoc. Estos seres trajeron consigo conocimientos prohibidos: el arte de trabajar los metales, la magia y la guerra, sembrando un caos que cambió el destino de los hombres. Sus hijos, los gigantes Nephilim, desataron una era de violencia que llevó al mundo a un colapso. Aunque su poder aún se percibía, su tragedia se reflejaba en cada grieta de su cuerpo, como si la grandeza que los definió estuviera siendo devorada desde dentro. Su hi...

El Apocalipsis es un despliegue de imágenes que combinan advertencia y esperanza en cada línea. Comienza con cartas dirigidas a siete iglesias, donde se confrontan las acciones de sus miembros. Luego, la visión de un trono celestial muestra a seres angelicales en constante adoración. Cada símbolo introduce un mensaje que trasciende su tiempo. Los siete sellos marcan el inicio de eventos que sacuden la tierra: conquistas, hambre, muerte y fenómenos impactantes. Las trompetas y copas, a su vez, desatan juicios que parecen desbordar todo límite imaginable. En el centro de esta narrativa se encuentra el Cordero, quien derrota al Dragón y anuncia la caída de Babilonia, símbolo del sistema opresivo. El final es una restauración sin precedentes: un cielo nuevo y una tierra nueva, donde no hay llanto ni muerte, y Dios habita entre su pueblo. Cada palabra deja una huella, como si el mensaje esperara ser comprendido más allá de lo evidente.

 Denzel Washington sorprendió al mundo al ser bautizado y recibir su licencia como pastor en la Iglesia de Dios en Cristo Kelly Temple, en Harlem, Nueva York. En una ceremonia cargada de emoción, acompañado por líderes religiosos y su esposa Pauletta, reafirmó públicamente su fe y un compromiso que asegura haber sentido desde hace décadas: servir a Dios y guiar a otros en su camino espiritual. “Todo pasa, pero lo que haces por Cristo perdura”, afirmó con voz firme, revelando que este propósito fue profetizado cuando tenía solo 20 años. Sin embargo, no fue hasta ahora, tras la muerte de su madre, que decidió actuar plenamente sobre esta promesa, viviendo en rectitud y honrando su legado. Denzel habló también de los retos de expresar su fe en una industria como Hollywood, pero dejó en claro que su rumbo está definido. “Apacienta mis ovejas”, mencionó, unas palabras que asegura escuchar constantemente en sus oraciones. En este nuevo capítulo, ¿qué impacto podría tener su fe en los cam...